”La Asociación de Economía Social de Aragón (CEPES Aragón) organizó ayer, lunes 28 de
octubre, la jornada “Comunidades Energéticas y Economía Social”, que tuvo lugar en el
Centro Joaquín Roncal de Zaragoza con el fin de dar a conocer en qué consisten las
Comunidades Energéticas, cuál es el proceso a seguir para constituirse como tal y algunos
proyectos que actualmente se están realizando en diferentes barrios de Zaragoza y
municipios de Aragón.
En la presentación de la jornada, a cargo de Adrián Serrano (presidente de CEPES
Aragón), se resaltó la importancia de promover un modelo energético sostenible y con un
acceso más equitativo y participativo a los recursos. En palabras de Serrano, “las
Comunidades Energéticas son una gran oportunidad para que las personas, los colectivos y
también las empresas puedan gestionar y producir energía de una manera democrática y
descentralizada, basada en los valores de transparencia, participación y cooperación”.
En la primera de las mesas redondas que tuvieron lugar a continuación, moderada por
Anabel García Recio, de Nabata Asesoría (Grupo La Veloz), participaron miembros de
cuatro Oficinas de Transformación Comunitarias (OTC): Javier Hernández de OTC Aragón
Energía Propia, Víctor Ballestín de OTC Zaragoza, Teresa Artigas de Participa Energía y
Carlos Pesqué de Energía Común. Todas las personas participantes estuvieron de acuerdo
en que la coordinación entre ellas es fundamental porque “orbitamos en torno a la misma
idea las 4 OTC y se echa en falta una eficiencia de los recursos. Cada uno hemos buscado
nuestros nichos de actuación pero, al ser un proyecto finito y que se ha puesto mucho
dinero para dar difusión, sería bueno un mayor grado de coordinación entre nosotros”,
comentaba Víctor Ballestín.
Porque estos proyectos tienen una duración de dos años y crear una Comunidad Energética
(CE) es un proceso lento. Por eso, las OTC hacen esa función de acompañamiento inicial,
atención y asesoramiento en asuntos jurídicos, sociales, administrativos y económicos.
Según Teresa Artigas, Participa Energía ha estado en 24 municipios entre Aragón y
Guadalajara, de los cuales cinco ya han constituidos su CE: “Hay interés en el territorio,
pero falta impulso”, algo que con lo que está de acuerdo Carlos Pesqué, que apunta que es
fácil de explicar el ahorro en la factura de la luz, pero que también hay que entender que las
CE son una oportunidad para poner en valor otros aspectos. Pesqué también es optimista
sobre la situación de Aragón respecto a otras comunidades autónomas: aunque no haya
esa cultura de autogestión y cooperativismo como si hay en Cataluña o Euskadi, considera,
sin embargo, que lo importante es que haya una voluntad política.
La segunda mesa redonda estuvo moderada por María Navarro, de Luco Energía, y se
centró en relatar las experiencias y los procesos para crear una Comunidad Energética en
un territorio. En la mesa participaron Paula Delmás, alcaldesa de Monforte de Moyuela,
Carmen Conte de Oliver Comunidad Energética, Maite Espiau de la CE de Peñaflor y Laura
Aguado de la de Mozota. Cada una expuso las razones que llevaron a formar una CE en su
población y el momento en el que se encuentran. Recalcaron la importancia de tener un
buen acompañamiento y asesoramiento en el proceso, un buen grupo de trabajo y, entre
bromas pero muy serias, que es necesaria mucha paciencia para lanzarse a un proyecto
como este. Sobre todo por aquello que no depende de ellas mismas, como puede ser la
parte burocrática.
Un buen ejemplo es el de Monforte de Moyuela que, según Delmás, tiene desde finales del
año pasado todos los papeles presentados para conectarse a la red y todavía no han
obtenido respuesta por parte de la distribuidora. Su proyecto de Comunidad Energética
surgió contra los macroparques renovables que se estaban instalando en los pueblos de
alrededor.
En el barrio Oliver también están pendientes de la distribuidora y, aunque llevan trabajando
13 meses, Conte considera que están en el momento bonito “de que las vecinas y vecinos y
las entidades autoconsumidoras se apropien de la asociación, porque hasta ahora lo hemos
llevado de la mano las entidades que hemos participado en el grupo motor”.
La necesidad y el deseo de hacer cosas por el pueblo es lo que movió a los 24 socios de
Mozota a crear su Comunidad Energética aunque se toparan con varias dificultades, como
los trámites o la captación de socios entre los vecinos. Por su parte, Maite Espiau
considera que para la CE de Peñaflor está resultando complicado encontrar terrenos o
tejados donde instalar las placas solares.
Durante la jornada, se estrenó además el vídeo que, con su mismo título, recoge el
testimonio de algunas entidades participantes, de otras ausentes y de CEPES, Nabata y
Endef, las cuales han colaborado en un proyecto de impulso y difusión de las CE que ahora
termina. El vídeo ya puede verse en el enlace.
Sostenibilidad, comunidad, cooperativismo, acciones que benefician a nuestros pueblos y
barrios… Son los valores en los que se apoyan estos proyectos que se muestran
esperanzados sobre la pronta puesta en marcha de sus Comunidades Energéticas.
La jornada terminó con la intervención de Magdalena Sancho, coordinadora del proyecto de Comunidades energéticas y parte de la Secretaría Técnica de CEPES Aragón, y las palabras de Juan García-Ovies Sarandeses por parte de la Dirección ejecutiva de la Fundación EDP, colaboradora principal de este proyecto.